¿CÓMO FUNCIONA UN TERMO ELÉCTRICO?

Un termo eléctrico, también conocido como calentador de agua eléctrico por acumulación, es un aparato que se encarga de producir y almacenar agua caliente sanitaria (ACS) para el hogar. 

Funciona calentando el agua mediante una o varias resistencias eléctricas y almacenándola en un depósito aislado para que esté disponible cuando sea necesario su consumo.

Mecanismo de un termo eléctrico

Para entender mejor cómo funciona un termo eléctrico es fundamental separar sus componentes y ver qué funciones realiza cada uno de ellos.

Entrada de agua fría

El agua fría entra en el depósito del termo a través de la tubería de entrada de agua de red.

Calentamiento del agua

La resistencia eléctrica dentro del depósito se encarga de calentar el agua hasta la temperatura deseada. 

La resistencia se encuentra sumergida en el agua, en algunos casos en contacto directo con el agua y en otros casos envainada, y se activa cuando el termostato detecta que la temperatura del agua ha bajado del nivel preestablecido.

Almacenamiento

El agua caliente se almacena en el depósito, aislado, para evitar la pérdida de calor. El aislamiento térmico del depósito es fundamental para mantener la eficiencia energética del termo eléctrico, ya que reduce las pérdidas de calor y, por lo tanto, el consumo de energía.

Salida de agua caliente

Cuando abres un grifo de agua caliente, el agua caliente del depósito sale por la tubería de salida. La salida de agua caliente suele estar situada en la parte inferior del termo, y el agua caliente se desplaza hasta el grifo.

Consumo de termo eléctrico

El consumo de un termo eléctrico es algo que preocupa a miles de hogares de nuestro país, y es normal, porque, en muchas ocasiones, es una cifra variable que siempre buscamos que descienda. 

Sin embargo, para saber cuánto consume un termo eléctrico, es importante ver de qué depende y qué se puede hacer para rebajar su coste, o por lo menos, que no se dispare el consumo. Estos son los factores que tienen lugar en el consumo del termo eléctrico.

Factores que determinan el consumo de un termo eléctrico

• Capacidad del termo: a mayor capacidad, mayor consumo de energía.

• Potencia de la resistencia: los termos eléctricos con mayor potencia de resistencia consumen más energía que los de menor potencia.

• Temperatura de consigna: cuanto más alta sea la temperatura a la que se configura el termostato, mayor será el consumo de energía.

• Aislamiento térmico: un buen aislamiento térmico del depósito ayuda a reducir el consumo de energía.

• Hábitos de consumo: el consumo de agua caliente también influye en el consumo de energía del termo eléctrico. Si se consume mucha agua caliente, el termo eléctrico tendrá que funcionar más tiempo y, por lo tanto, consumirá más energía.

¿Cómo calcular el consumo de un termo eléctrico?

Para calcular el consumo de un termo eléctrico, puedes utilizar la siguiente fórmula básica:

Consumo (kWh)=Potencia del termo (kW)×Tiempo de uso (h)

Donde:

• Consumo (kWh): energía consumida por el termo eléctrico en un periodo determinado, medida en kilovatios-hora.

• Potencia del termo (kW): potencia del calentador, indicada en kilovatios. Esta información suele estar especificada en el manual del usuario o en una etiqueta en el termo.

• Tiempo de uso (h): número de horas que el termo ha estado operando o calentando agua.

Por ejemplo:

Supongamos que tienes un termo eléctrico con una potencia de 1.5 kW y quieres calcular el consumo después de que ha estado encendido durante 3 horas.

Consumo=1.5 kW×3 h=4.5 kWh

Esto significa que, en este ejemplo, el termo eléctrico ha consumido 4.5 kilovatios-hora de electricidad.

Para un cálculo más preciso del consumo real, sería necesario considerar los ciclos de encendido y apagado del termostato, así como la eficiencia del aislamiento del termo.

Las pérdidas térmicas se pueden encontrar en la ficha técnica del termo eléctrico.

¿Cómo reducir el consumo del termo eléctrico?

Existen diferentes medidas que puedes tomar para reducir el consumo del termo eléctrico:

• Elige un termo eléctrico con una capacidad adecuada a tus necesidades.

• Ajusta la temperatura de consigna a una temperatura razonable.

• Reduce el consumo de agua caliente.

• Apaga el termo eléctrico cuando no lo vayas a utilizar durante un periodo prolongado de tiempo.

Consejos para ahorrar energía con el termo eléctrico

• Dúchate en lugar de bañarte.

• Cierra el grifo mientras te lavas los dientes o te afeitas.

• Instala grifos termostáticos.

• Aísla las tuberías de agua caliente.

• Realiza un mantenimiento regular del termo eléctrico.

Siguiendo estos consejos, puedes reducir el consumo de energía de tu termo eléctrico y ahorrar dinero en tu factura de la luz.

Recuerda que el consumo de un termo eléctrico puede variar en función de los factores mencionados anteriormente.